“La Universidad nos enseña a pensar pero después, lo que hagamos con nuestra profesión depende de nosotros, de cuánto nos atrevamos a asumir nuevos desafíos”.
Daniel Londero es egresado de la Católica de las carreras de Bioquímica y Farmacia. También realizó con nosotros una Maestría en Dirección de Empresas. Recientemente fue nombrado Head de Bayer Pharmaceuticals para el Cono Sur. En esta nota nos cuenta sobre rol, su carrera y sus expectativas.
¿Qué implica ser Head de la división Pharmaceuticals para la región Cono Sur en Bayer?
Una gran responsabilidad porque se trata de dirigir la operación comercial de los productos farmacéuticos en cinco grandes países como Argentina, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay.
También un gran compromiso, porque los equipos con los que trabajo son los responsables de buscar permanentemente cómo llegar con las medicinas de una empresa innovadora a cada vez más personas, con la finalidad de mejorar su calidad de vida.
¿Hay objetivos aún por cumplir en tu carrera laboral?
Sí, por supuesto. Hay una revolución en la medicina con el advenimiento de nuevas terapias como la génica, muy prometedoras para curar patologías que hasta ahora no tienen cura, y me gustaría aportar mi granito de arena para hacer que estén disponibles para los pacientes que las necesiten.
Además, me encanta dedicarme al desarrollo profesional de las personas con las que trabajo y mi propósito es poder ayudarlos, como desinteresadamente me ayudaron muchos líderes con los que he colaborado.
¿Cómo tomaste la decisión sobre tu profesión?
Siempre me interesaron la biología y la química. Las carreras de Bioquímica primero y Farmacia luego, significaron una gran oportunidad para incursionar en las ciencias químicas y apasionarme por la experimentación.
Además de ser bioquímico y farmacéutico hiciste una Maestría en Dirección de Empresas ¿te parece fundamental este enfoque para desempeñarse en una empresa comercial?
Cuando ingresé al mundo empresarial, me di cuenta que necesitaba incorporar conocimientos sobre finanzas, marketing, recursos humanos, etc. El máster -que también cursé en la UCC- me dio todo eso y sin duda fue fundamental en mi desarrollo.
¿Qué podrías destacar de tu experiencia en la Católica?
En la Católica conocí a un grupo humano fantástico de docentes y alumnos, muchos de los cuales se han convertido en grandes amigos y compañeros de la vida. La Universidad nos preparó no solo para ser buenos profesionales sino también personas comprometidas y con ganas de impactar positivamente en la sociedad.
¿Cómo se desarrolló tu carrera profesional?
Cuando era estudiante, fui ayudante alumno y descubrí que disfrutaba la enseñanza, así que, al terminar la Facultad, colaboré como docente en varias cátedras. En ese tiempo, también gané una beca como bioquímico en el Hospital Infantil de Córdoba, donde me desempeñé como residente en inmunología, especialidad que me apasionaba. Mientras cursaba el segundo año, recibí una oferta para unirme a una compañía farmacéutica y la acepté. No fue una decisión fácil porque se trataba de una actividad muy diferente a la que yo estaba acostumbrado, pero decidí salir de mi zona de confort, arriesgarme y aprender algo distinto. Y definitivamente eso resultó ser un gran giro en mi carrera.
Ya en Buenos Aires, di los primeros pasos en marketing de productos farmacéuticos y en dirección de equipos de ventas, y fui asumiendo roles de mayor responsabilidad.
Un punto de inflexión importante en mi vida familiar y profesional se produjo cuando la empresa en la que actualmente trabajo me ofreció trasladarme con mi familia a México, iniciando una carrera internacional que luego continuó en Estados Unidos, Alemania, Estados Unidos nuevamente y finalmente Chile, donde actualmente resido. Durante ese "viaje", trabajé en roles regionales y locales que me permitieron aprender sobre políticas de salud, diversas formas de comercialización y diferentes sistemas regulatorios. Tuve el privilegio de dirigir equipos que introdujeron medicinas innovadoras en muchos países. En el plano familiar, convivimos con diferentes culturas y en cada destino conocimos personas muy valiosas que nos enriquecieron, logrando que la experiencia sea aún más gratificante.
¿Qué consejo le darías a alguien que está decidiendo su carrera?
Primero, que defina el área de su interés. Hay profesionales muy preparados que pueden asistirlo/a en esta etapa crucial y mi recomendación es que acuda a ellos/as si no tiene claridad al respecto.
Luego que investigue todas las opciones y carreras disponibles en ese área en particular.
Finalmente, que converse con personas que se desempeñan en las diferentes profesiones que podrían interesarle y en lo posible, que los visite en sus puestos de trabajo. El año que ingresé a la Universidad, asistí a las Jornadas de Puertas Abiertas y eso fue de gran utilidad, sobre todo por las conversaciones con los estudiantes de los últimos años que compartieron su experiencia en las diferentes carreras.
¿Qué consejo le darías a alguien que está en los últimos años de su carrera o ingresando a su carrera laboral?
Que aproveche cada oportunidad que tenga para seguir aprendiendo. Que experimente y no tenga miedo de probar una nueva forma de encarar un reto; si sale bien, a festejar, si sale mal, a no bajar los brazos y a aprovechar todo lo que aprendió para volver a intentarlo.
Que tenga siempre presente que la Universidad nos enseña a pensar, pero después, lo que hagamos con nuestra profesión depende de nosotros, de cuánto nos atrevamos a asumir nuevos desafíos.
Y sobre todo, que se pregunte siempre cuál es su propósito, qué lo motiva, qué hará que cada mañana se levante entusiasmado con el rol que va a asumir.