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Intercambio en pandemia. Manuela, Colombia

Publicado el 18/11/2020 en AcadÃ©micas

¿Cómo asumí mi intercambio en medio de una pandemia? Me respondo esta pregunta casi todos los días y creo que la afronté y la llevé de la mejor manera. Se me cruzaron muchas preguntas en el camino como ¿será que debo volverme a Argentina", "¿valdrá la pena seguir esperando a que la presencialidad vuelva?".

Aun así este intercambio fue una de las mejores experiencias de mi vida. Aprendí tanto en al ámbito académico como en lo personal, me demostré todos los días que se puede ser paciente, que se debe dar lo mejor de uno para que todo pueda funcionar y, sobre todo, aprendí a no desfallecer cuando se trata de cumplir un sueño, en mi caso, ser odontóloga.

Lo mejor de este proceso fue la relación tan cercana y especial que se crea con tus nuevos compañeros de clase y con tus profesores. Aprendí del día a día de cada uno, de las experiencias que contaban y la relación que establecimos fue preciosa. En todo este tiempo, en mi hogar, aprendí no solo de odontología, sino que también aprendí a cocinar, a hacer deporte (cosa que nunca hacía) y aprendí, sobre todo, a conocerme un poco más.

Compartí con gente maravillosa, mis vecinos hicieron de mi cuarentena algo único. Tuve la fortuna de compartir con un niño de 5 años que, aunque 15 años menor que yo, me hacía feliz siempre. Dibujábamos juntos, veíamos películas, hasta teníamos clases virtuales para hacernos compañía. Lo sentí como el hermanito que nunca tuve y creo que cosas no podría haberlas vivido en tiempos normales.

A pesar de haber vivir un intercambio en cuarentena, fue una experiencia única y la repetiría una y mil veces. Aprendí de mi entorno de una manera especial y maravillosa, y contar que hice un intercambio en medio de una pandemia no es algo que uno cuenta dos veces en su vida.

Manuela Jiménez Escobar. Estudiante de odontología de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Católica de Córdoba.